El 15 de diciembre del 2020, un trágico incidente impactó a la comunidad laboral en Perú. Dos jóvenes trabajadores de McDonald’s en Pueblo Libre, Lima, perdieron la vida debido a una descarga eléctrica mientras realizaban tareas de limpieza.
Las familias de los fallecidos han denunciado que, además de trabajar más de las 24 horas semanales estipuladas, las condiciones laborales no eran seguras y que las advertencias previas sobre problemas eléctricos no fueron atendidas. La investigación reveló que una máquina expendedora de bebidas tenía cables expuestos y un aislamiento eléctrico deficiente, lo que resultó en una fuga de 36 mil amperios.
José Carlos Andrade, director general de Arcos Dorados, admitió que hubo una falta de comunicación interna y que no se notificó al área de mantenimiento sobre los problemas con la máquina. La Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) concluyó que la empresa cometió varias infracciones graves en materia de seguridad y salud en el trabajo, lo que resultó en una multa de S/845.670.
La importancia del mantenimiento y cuidados
En este triste suceso resalta la crucial importancia del mantenimiento regular y adecuado de los equipos y las instalaciones en cualquier lugar de trabajo. Las fallas en los sistemas eléctricos y el mal estado de las máquinas pueden poner en grave riesgo la seguridad de los trabajadores. Invertir en mantenimiento preventivo y en la compra de equipos de protección personal (EPP) no solo es una responsabilidad legal y moral, sino también una medida esencial para prevenir accidentes y proteger vidas.
El mantenimiento preventivo implica revisar y reparar regularmente las máquinas y equipos antes de que presenten fallas. Esto incluye asegurarse de que todos los cables eléctricos estén debidamente aislados, que las máquinas funcionen correctamente y que se cumpla con las normativas de seguridad vigentes. Un sistema de mantenimiento adecuado también debe incluir la capacitación continua de los empleados en prácticas de seguridad y el uso correcto de EPP.
Implementar estos cuidados no solo protege a los trabajadores, sino que también mejora la eficiencia operativa y reduce costos a largo plazo al prevenir daños mayores y accidentes. La negligencia en el mantenimiento puede tener consecuencias devastadoras, como lo demostró esta tragedia en McDonald’s.
Medidas preventivas y mejores prácticas
Evaluación regular de riesgos
Realizar evaluaciones de riesgo periódicas es fundamental para identificar y mitigar posibles peligros en el lugar de trabajo. Estas evaluaciones deben incluir inspecciones detalladas de todos los equipos y sistemas eléctricos.
Mantenimiento preventivo
Implementar un programa de mantenimiento preventivo que incluya inspecciones regulares y reparaciones necesarias de todos los equipos. Asegurarse de que todos los cables eléctricos estén debidamente aislados y que las máquinas funcionen correctamente.
Uso de equipos de protección personal (EPP)
Proveer a los empleados con EPP adecuado y asegurar que lo utilicen correctamente. Esto incluye guantes y botas aislantes, cascos, y otros equipos necesarios según la naturaleza del trabajo.
Plan de respuesta a emergencias
Desarrollar y ensayar un plan de respuesta a emergencias que incluya procedimientos para evacuaciones, primeros auxilios y comunicación de incidentes. Los empleados deben estar familiarizados con este plan y saber cómo actuar en caso de emergencia.
Esta tragedia es un recordatorio doloroso de la importancia de mantener altos estándares de seguridad en el lugar de trabajo. Las empresas deben asumir la responsabilidad de garantizar que sus instalaciones sean seguras y que sus empleados estén protegidos en todo momento. El mantenimiento adecuado y el cuidado preventivo son esenciales para evitar tragedias y asegurar un entorno laboral seguro para todos.